Seguramente os habréis dado cuenta de que en los últimos tiempos la diversidad de perfiles en el desarrollo web ha ido aumentando según el incremento de las necesidades y la profesionalización de nuestra profesión lo requería. La figura del “diseñador web” ha desaparecido tal como la conocíamos y se ha transformado (o ramificado) en desarrolladores back-end, front-end, UX, UI, etc. La especialización lo llaman. Pero, ¿es esto lo ideal?.
Archivados en la categoría ‘Opinión’
Memorias de un ex-autónomo
De repente, un día decides que quieres dedicarte a hacer algo que te gusta sin depender de un contrato de empleado. Buscas un asesor (o te conviertes en él), te informas sobre lo que necesitas para llevar a cabo esa idea que ha rondado por tu cabeza, sigues las instrucciones indicadas y ya está. Ya eres autónomo.